¿Qué hago con mi alarma si tengo mascotas?
Por suerte los sistemas de alarma para hogares están preparados para poder discriminar a nuestras mascotas, evitando que las propias mascotas activen el sistema de seguridad.
¿Cómo funcionan los sistemas de alarma con mascotas?
Los sensores se pueden calibrar a un peso determinado, de forma que solo se disparen y hagan saltar la alarma si se detecta el movimiento de alguna cosa que supere el peso determinado. De esta forma se permite el movimiento de todo aquello que no supere el peso marcado, todo movimiento que se detecte y tenga un peso superior al número marcado hará saltar la alarma dando aviso a la Central Receptora de Alarmas.
¿Este sistema sirve con cualquier mascota?
Sí, pero con matices. Es necesario valorar diferentes realidades como el tipo de casa, el tipo de alarma y sus posibilidades. La clase y fisionomía de la mascota son aspectos a tener en cuenta para dar una respuesta adecuada.
Soluciones para las alarmas con mascotas.
Tenemos diferentes opciones para solucionar los problemas que nos pueden ocasionar nuestras mascotas con los sistemas de alarma.
Calibrar los sensores.
Consiste en calibrar los sensores de movimiento y ajustarlos en función de las necesidades concretas del usuario. Esta es la mejor solución si nuestra mascota esun perro de raza pequeña que no supere los 15 o 20 kg de peso, los sensores se pueden configurar de forma que solo detecten el movimiento a partir de un peso concreto.
Si se opta por calibrar los sensores, lo mejor es afinar al máximo el calibrado de los sensores con el peso de tu mascota y nunca calibrar por encima de los 15 kg, ya que no será seguro.
Mascotas grandes y gatos.
Si nuestro animal de compañía es una mascota grande y de peso considerable, la opción antes comentada no es una solución viable, no podemos discriminar un animal de 40kg o más porque tampoco recibiremos la alerta de alarma en el caso de que se trate de un intrusión. Lo más recomendable es optar por adaptar un espacio exclusivo y sin sensores para la mascota dentro del hogar, una habitación, un patio o la terraza, donde permanecerá la mascota, mientras que la alarma esté activada.
El problema con los gatos es otro muy disintió al del peso y el tamaño del animal, la principal dificultad con la que nos encontramos con estos animales son sus hábitos de juego y actividad constante. Suelen moverse y saltar a sus anchas por la casa haciendo que los sensores detecten un cambio de volumen sospechoso y, por tanto, hagan saltar el sistema de alarma.
Para evitar este problema, la mejor opción es la de adaptar un espacio para el gato cuando no haya nadie en casa y la alarma este activada.
Configurar la actuación de los sensores de alarma.
Otra opción es la de configurar y limitar la función de la alarma, pongamos un ejemplo, si nuestra vivienda tiene tres puntos de acceso claves como pueden ser una puerta y dos ventanas sin rejas, podemos configurar el sistema de alarma para que solo estén activados los sensores magnéticos de la puerta principal y las ventanas, de forma que solo se disparara la alarma en caso de que se abra la puerta o alguna de las ventanas, en ese momento es cuando se activara todo el sistema incluidos los sensores con cámara haciendo posible la verificación de la alarma por parte de la Central Receptora de Alarmas.